Ungido y condenado, réprobo y dilecto, Moisés es una de las figuras más enigmáticas y ricas del judaísmo. Elegido por Dios para guiar a su pueblo en el desierto, es paradójicamente excluido, por el propio Dios, de la Tierra Prometida
Apartándose de la interminable discusión sobre la existencia real o imaginaria del profeta y concentrándose en la densidad mítica y metafórica de su misión y de su conflicto, Santiago Kovadloff lleva a cabo en este libro una labor filosófica renovadora.
En la figura imponente de Moisés, el autor reconoce la impronta de lo trágico -soslayada por la exégesis talmúdica- y explora una zona de convergencia hasta hoy subestimada entre lo griego y lo judío. Se trata de una vigorosa propuesta teológico-filosófica que ilumina con lucidez y originalidad el significado del judaísmo en nuestra cultura.
Hegel, Kierkegaard, Nietzsche, Kant, Cioran, Buber, Levinas son interpelados en estas páginas de prosa admirable y sugerente en las que Kovadloff emparienta el destino trágico de Moisés con el de Edipo y, en definitiva, con el de toda la humanidad.