Su diámetro de 35 cm ofrece el tamaño perfecto para presentar manzanas con miel, jaleas, nueces y otros alimentos tradicionales, manteniendo la estética refinada que toda ocasión especial requiere. El cristal de alta calidad aporta brillo y transparencia, creando un contraste armonioso con los colores vivos de los platos kosher y los símbolos de Año Nuevo.
El diseño combina líneas sobrias y un acabado pulido que refleja la luz de manera uniforme, logrando un aspecto sofisticado tanto en interiores modernos como en decoraciones más clásicas. La robustez del cristal y su superficie fácil de limpiar facilitan el uso frecuente durante las festividades, sin perder su apariencia inicial con el paso del tiempo. Además, su perfil amplio permite montar composiciones centrales con frutos y elementos decorativos sin que se vean recargadas.
Ideal para quienes buscan un accesorio versátil que aporte elegancia a la mesa de Rosh Hashaná, este plato también funciona como base para centros de mesa o para servir aperitivos en celebraciones familiares y eventos comunitarios. Su estética neutra facilita la combinación con mantelería de distintas texturas y colores, potenciando la presentación de los alimentos y creando una escena visualmente atractiva para recibir el año nuevo con solemnidad y buen gusto.







