Su diseño compacto permite colocarlo en mesas de desayuno, barras de buffet y cocinas domésticas sin ocupar mucho espacio, mientras que su transparencia realza el color y la textura natural de la miel, facilitando identificar el contenido y controlar la porción.
El material acrílico ofrece ventaja frente al vidrio: menor riesgo de rotura, ligereza para manipularlo con una sola mano y limpieza rápida. La boca del vaso está diseñada para facilitar el acceso con cucharillas, palillos o vertedores pequeños, evitando goteos y manteniendo orden en la superficie donde se apoya. La base estable reduce el riesgo de vuelco accidental y su acabado liso impide la acumulación de residuos, lo que favorece una higiene adecuada entre usos.
Perfecto para uso doméstico, hostelería y ventas al por menor, este vaso para miel combina funcionalidad y presentación. Su tamaño de 8,5 cm resulta versátil para distintas cantidades de miel, desde porciones individuales hasta servicios compartidos. Además, el acrílico permite personalización con etiquetas o adhesivos sin afectar su integridad, una ventaja para comercios que quieran mantener identidad de marca.





